Dirigida por el brasileño Andrucha Waddington ("Casa de arena" o "Yo, tú, ellos") consigue entretener, con la excusa del triángulo amoroso como tópico, en su homenaje al nuevo teatro que nos dejó como legado el poeta. Dibujo de un siglo XVI donde el valor de la vida se medía cada día o el carpe diem parecía el único límite a la forma de vivir, con un romanticismo como frontera del placer fugaz rodeado de mentiras.
La sinopsis dice: "Biopic del poeta y dramaturgo Lope de Vega (1562-1635). Ambientada en 1588, cuando Lope se ve obligado a elegir entre una relación con una mujer que le puede ayudar a dar un paso adelante en su carrera y otra que representa el amor verdadero. Todo comienza cuando un joven soldado regresa de la guerra al Madrid en construcción del siglo XVI. Mientras lucha por sus inquietudes y ambiciones, dos mujeres se cruzan en su vida. Una liberal, empresaria de éxito; la otra noble, soñadora. Junto al amor se le presenta la aventura y mientras aprende lo que de verdad significa amar, es perseguido por la justicia, encarcelado y amenazado por sicarios hasta esconderse en el puerto de Lisboa, donde se está preparando el mayor ejército naval que haya contemplado el mar".
Asentada sobre un reparto sólido, con "Lope" de la mano del carismático Alberto Amman("Celda 211") que me gusta pero no me enloquece en su dibujo del pillo truhán, o Pilar López de Ayala ("Báilame el agua", "Juana la loca" o "En la ciudad de Sylvia") y Leonor Watling ("Hable con ella", "Son de mar" o "Los crímenes de Oxford") que sí consiguen representar la pasión y la pureza del amor. Pero además el plantel de secundarios es indiscutible con nombres como Luis Tosar, Juan Diego, Antonio de la Torre, Antonio Dechent, Ramon Pujol, Mariano Venancio, Jordi Dauder o Carla Nieto...maravillosos.
También nos ofrece un contexto ceñido al milímetro gracias al trabajo de vestuario de Tatiana Hernández (en la actualidad en exposición en el Museo del traje de Madrid hasta el 28 de Noviembre), la música de Fernando Velázquez, y en general la apabullante dirección artística de César Macarrón, que cosecharán premios merecidos seguro.
Pero todo ese despliegue de recursos técnicos e interpretativos no consiguen convencer, realmente es una película que no cae en fallos garrafales y sin embargo no enamora, le falta la chispa que arrastra al espectador por la historia, y muchas veces flaquea en emociones y sucumbe a la mera sucesión de hechos históricos.
Entretiene sin pasión, pero a su favor el paralelismo entre la vida y lo escrito por Lope destaca en cada fotograma, con esa dualidad entre comedia y drama, entre egoísmo y amor...enmarcado en un homenaje del autor que quiso que la ficción fuera real.
Recuerdo que la película acaba con la definición del amor del poeta y que yo utilicé en el repaso a la pasada noche de los Oscar como un canto de amor al cine, otra vez recurro a sus versos para quedarme con el espíritu de un Lope que erró, acertó, se dolió e hizo daño...pero siempre vivió..."Esto es amor, quien lo probó, lo sabe"
Si no la has visto ¿A qué esperas? Si lo has hecho ¿Qué opinas tú?
Próximamente más, y si es posible...mejor
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