Peliculón de Álvaro Pastor y Antonio Naharro que le ha puesto voz y alma al síndrome de down, tándem de directores que comenzaron esta historia partiendo de la realidad de Pablo Pineda. Álvaro Pastor dirigió en el pasado tres cortometrajes "Invulnerable", "Uno mas, uno menos" y "Los dardos del amor", mientras que Antonio Naharro además de trabajar como guionista ha hecho sus pequeños pinitos como actor.
Daniel (Pablo Pineda), un joven sevillano de 34 años, es el primer europeo con síndrome de Down que ha obtenido un título universitario. Comienza su vida laboral en la administración pública donde conoce a Laura (Lola Dueñas), una compañera de trabajo sin discapacidad aparente. Y se enamora de ella.
La búsqueda de la normalidad en todos los ámbitos, no sólo en los aspectos laborales, sino en aquellos aspectos más íntimos, en el desarrollo sexual y romántico en igualdad.
Mezcla de ficción y realidad donde el actor parece interpretarse a sí mismo, aunque en su vida real ha superado incluso más barreras que el protagonista de la película. Te hace dudar si está interpretando o sólo recordando pasajes de su auténtica vida.
Y luego llega ella, clave y sentido de todo el metraje, una Lola Dueñas que se hace gigante por fin con este protagonista, aunque mucho antes ya nos ha dejado sin palabras en trabajos anteriores como "Mar Adentro" o "Volver", no creo que a estas alturas nadie dude de la impresionante capacidad interpretativa de esta mujer.
Y luego llega ella, clave y sentido de todo el metraje, una Lola Dueñas que se hace gigante por fin con este protagonista, aunque mucho antes ya nos ha dejado sin palabras en trabajos anteriores como "Mar Adentro" o "Volver", no creo que a estas alturas nadie dude de la impresionante capacidad interpretativa de esta mujer.
Sin menospreciar el guión de los directores que supieron conducir los tópicos que todos llevamos de esa enfermedad sin pudor, Pineda y Dueñas son el porqué de todo, el fundamento, nada supera la capacidad de comunicación entre ellos y con el espectador con una sola mirada. Eso es magia, y eso lo consiguieron los dos.
Con inteligencia, sin vergüenza, con credibilidad, sin cortapisas...llegó "Yo, también", y por lo menos a mí, me cautivó.
En cuanto a la BSO aunque la ganadora al Goya como mejor canción fue "Yo también" de Guille Milkyway,
sin embargo la canción que para mí fue un descubrimiento fue "I don't believe in love" de The School. Delicadamente maravillosa.
Si no la has visto ¿A qué esperas? Si lo has hecho ¿Qué opinas tú?
2 comentarios:
Hola Adhara!
Pues la peli tiene buena pinta y habrá que verla... Además como la pones así de bien, pues más convencido la veré.
Saludos!
De las propuestas españolas del pasado año para mí es una de las destacables, ya me contaras que opinas cuando le eches un vistazo.Saludos!
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